Por Roberto Fernández Blanco.-

Sindicalismo, la más nefasta y dañina organización oligárquica de afanípteros parásitos sociales improductivos y destructivos, falsarios administradores que medran con la abusiva expoliación de los trabajadores productivos que son los que generan y multiplican la riqueza proveyendo bienes y servicios (emprendedores y asalariados) a quienes despojan de parte de los frutos de su producción (verdadera explotación por plusvalía) obligándolos a pagar un canon arbitrario por supuesta y falaz protección forzados por las absurdas leyes heredadas de ese plagio del fracaso socialista que fue el justicialismo, leyes que imponen esta sustracción de riqueza a los trabajadores para alimentar y sustentar -mediante amañadas administraciones- el fastuoso nivel de vida de estos enriquecidos maleantes, destructivos antipatriotas disfrazados de protectores de los trabajadores y cómplices del destructivo desajuste social-económico, decadencia y miseria, resultantes de la corrupción kirchnerista.

Debe eliminarse esta arbitraria quita a emprendedores y contratados/asalariados por parte de los predadores barones del sindicalismo para ser dejada en manos de los trabajadores, sus auténticos dueños, recomponiendo sus fracturados ingresos.

Necesita nuestra patria subsanar con urgencia este absurdo para liberar a los productores de riqueza de esta infame explotación que atrofia y espanta la inversión, enerva el potencial productivo y corroe los cimientos de nuestra organización social.

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