Por Carlos Tórtora.-

Javier Milei no puede desarrollar tranquilo su nueva gira internacional porque los escándalos florecen en su gobierno. La polémica desatada por la retención en dos depósitos del gobierno de 6 millones de kilos de alimentos próximos a vencer, terminó hasta ahora con el despido del Secretario de Niñez y Familia, Pablo La Torre, aunque en realidad el verdadero motivo del despido serían los sobresueldos pagados a través de la Organización de Estados Iberoamericanos. El hermano de éste, Joaquín de la Torre, es uno de los principales aliados de La Libertad Avanza en Buenos Aires y reaccionó rompiendo el bloque de senadores de La Libertad Avanza. A todo esto, el escándalo afecta seriamente a Sandra Pettovello, que es una de los pocos funcionarios que Milei sí protege políticamente.

La extrema sensibilidad de la cuestión alimentaria hace que la cuestión crezca más allá de la racionalidad política.

Mientras tanto, fuentes oficiales dejaron trascender que el gobierno podría denunciar al exjefe de gabinete Nicolás Posse por el funcionamiento de una red de espionaje a alto nivel dentro del gobierno, lo que habla del grado de desconfianza que rige en el primer círculo del poder.

Milei defiende a su hermana Karina, a Pettovello y no mucho más. En lo que hace al resto, está dispuesto a entregar las cabezas que haga falta para mantener la gobernabilidad.

Sturzenegger aumentaría la conflictividad

Fuentes del gobierno deslizaron que en los próximos días podría trascender un nuevo escándalo que golpearía al círculo áulico del presidente.

Hasta hace poco, los libertarios tenían la iniciativa política ante la oposición pero ahora parecen haberla perdido.

Sólo la media sanción de la Ley Bases parece poder oxigenar a un oficialismo que está aturdido. La inminente llegada al Gabinete de Federico Sturzenegger, enfrentado con toda la oposición, sólo echaría más leña al fuego.

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