Por Carlos Tórtora.-

El gran escándalo que envuelve a Alberto Fernández no pudo llegar en un momento más oportuno para el gobierno. El caso del expresidente acapara los medios y, sobre todo, permite tapar los escándalos que están sacudiendo a los libertarios con mayor intensidad que un tiempo atrás.

El presidente del bloque de diputados nacionales de La Libertad Avanza, Gabriel Bornoroni, se quedó con el manejo del PAMI y de la ANSES igual en Córdoba, a través de las designaciones de Andrés Bauzá y Marcos Patiño Brizuela. Ahora, un sector de los libertarios acusa a Bornoroni de querer traspasar capital del tradicional Hospital Italiano al Sanatorio Parque, una institución de menor jerarquía e infraestructura, que es propiedad de Carlos Martínez Soto, casado con Ana Bornoroni, hermana del titular del bloque de LLA. Este escándalo que se inicia sorprende a Bornoroni teniendo que enfrentar una situación de descontrol en el bloque. Este último, al igual que Martín Menem, está cuestionado por la incapacidad de conducir a sus legisladores.

Tanto Menem como Bornoroni son piezas fundamentales del armado político de Karina Milei, que atraviesa así por un pésimo momento.

Desmanejo político

La última crisis en el bloque de diputados libertarios se originó en la visita de algunos de sus miembros a un grupo de militares condenados por violaciones de derechos humanos. Luego de varios episodios, Marcela Pagano acusó a Lilia Lemoine de mitómana y el bloque está nuevamente roto, luego del alejamiento de su expresidente Oscar Zago y otros.

Mientras el bloque de diputados entra en la anarquía, en la Casa Rosada se desata la interna entre Karina Milei y Santiago Caputo. La primera intenta bloquear la creciente concentración de poder del segundo.

Por ejemplo, la hermana del presidente intenta evitar que Caputo se quede con el manejo de la millonaria pauta publicitaria de la AFIP y de YPF, que aquél está empezando a negociar a través de Alejandra Rafuls.

El choque entre Karina y Caputo es en principio por el control de las cajas, lo que es la pantalla de una batalla por el control político del gobierno. Como es lógico, la hermana del presidente lleva las de ganar pero posiblemente deba pagar el precio de los escándalos.

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